En Lavandería Haiti nuestro proceso de lavado de alfombras garantiza la eliminación de todo tipo de manchas, desde la más habituales como de comida o bebidas, hasta las de los pequeños artistas como pintadas o plastilina pegada.
El proceso de lavado aplicado al lavado de sus alfombras garantiza una máxima higiene de las mismas y es el recomendado en caso de sufrir algún tipo de enfermedad alérgica (alergia al polvo, pelo de animales, ácaros, …) o respiratoria como el asma.
Los expertos de Lavandería Haiti te proveen con la mejor solución de lavado para quitar las manchas de tus alfombras. Quitar las manchas por ti mismo puede suponer un riesgo. Mejor, confía en la ayuda profesional que te brinda Lavandería Haiti.
El cuidado de las alfombras requiere tiempo y un específico know-how. Nuestro equipo de profesionales ha desarrollado técnicas específicas para el cuidado y limpieza de alfombras y por ello te recomendamos que no intentes tratarlas por ti mismo y las traigas directamente a nuestras tintorerías.
Tras medir las alfombras en la misma tienda, nuestro equipo realizará un diagnóstico de tu alfombra para decidir cuál es el tratamiento más adecuado para ese tipo de alfombra y de mancha que tenga.
Antes que nada hay que señalar que una alfombra es, por naturaleza, extremadamente resistente al uso y al desgaste y que, en general, cuanto mayor sea la calidad mejor envejece. Es por ello que, aunque, hay que cuidar correctamente las alfombras no es necesario estar constantemente pendiente de ellas preocupados por cualquier pequeña mancha. Hay que aceptar que son elementos que están sobre el suelo y bajo nuestros pies y que, por lo tanto, tarde o temprano se mancharán. No hay que preocuparse por ello puesto que todas las alfombras se pueden lavar y restaurar.
Una alfombra oriental se debe aspirar al menos una vez a la semana en la dirección favorable del pelo. La aspiradora no representa ningún problema para la alfombra, únicamente hay que tener cuidado al aspirar los flecos. Esta operación se debe realizar con delicadeza a fin de no dañarlos
Para uso doméstico, una alfombra se debe mandar lavar a un centro especializado aproximadamente cada 5 a 10 años.
Según el tipo de alfombra el lavado se realizará en seco o con agua.
En el lavado con agua, en un primer paso, la alfombra se agita para liberarla de arena, pequeñas piedras, etc. A continuación, se lava con agua y detergente especial no soluble en grasa. Por último, se exprime el líquido restante fuera de la alfombra y se cuelga en un lugar amplio y seco. Este tipo de limpieza le da a la pila elasticidad y brillo, por lo que los colores parecerán más brillantes y claros.
1. Trate de eliminar las manchas inmediatamente, antes de que se sequen.
2. En caso de que se haya vertido líquido, el primer paso es quitar la máxima cantidad posible de dicho líquido mediante una cucharada sopera haciendo presión sobre la alfombra en el sentido del pelo de manera que el líquido entre en la cuchara. Hay que repetir esta operación hasta que ya no salga más líquido.
3. Acto seguido humedecer un trapo limpio y blanco con el que ir frotando la mancha para eliminarla en la medida de lo posible.
4. De ser necesario, diluya la mancha con agua tibia.
5. De ser necesario, puede usar un poco de detergente.
6. Seque el área afectada con un secador de pelo, un ventilador o bien dejando, simplemente, la alfombra al sol.
